Te sigo comentando acerca de los 5 elementos para transformar tu cuerpo. El primero al que hicimos referencia fue a la comida y la nutrición. El segundo fue el movimiento y el ejercicio. El tercero fue descanso y sueño.
Ahora vamos con el cuarto: mentalidad para el éxito.
Puedes tener el mejor plan de alimentación y la mejor programación de entrenamiento, pero si no se convierte en acción es difícil conseguir resultados.
Todo gira alrededor de cómo planteas tus objetivos y qué tan dispuesto estás a ejecutar el plan de acción.
1. Planteamiento del objetivo/ propósito
Gran parte de abandonar un objetivo es porque no sabemos el camino que implica llegar a éste. Por ejemplo: Es año nuevo y tu propósito es "tener un cuerpazo". La pregunta aquí es ¿Dónde estás? y ¿qué necesitas para llegar a tenerlo?
De esta forma podrás fragmentar tu objetivo en metas pequeñas que te lleven al éxito, sin bloquear a tu mente haciéndole pensar que tiene que llegar al objetivo final rápido. "Es un maratón, no es una carrera"
2. ¿Qué tan dispuesto estás a sacrificar/hacer lo que implica llegar al objetivo?
Si los cambios que estás haciendo, tienen fecha de caducidad, es posible que no consigas lo que quieres o que te dure poco.
Por eso es importante antes de empezar, preguntarte si estás dispuesto a hacer y mantener las acciones que conlleva tu objetivo. Aquí la importancia de fragmentar un objetivo ambicioso, en muchas tareas/metas relativamente fáciles.
3. Encuentra el motivo en ti
La motivación es muy importante para comenzar el plan de acción, pero es momentánea.
Si todo el tiempo estás buscando el motivo en personas/cosas externas a ti, te va a costar trabajo ser constante y consistente. Por eso es que es importante que sepas "por qué/quien lo estás haciendo" y no pierdas de vista ese combustible que te hace actuar.
Espero que evalúes con mucho detalle estas recomendaciones. La semana próxima veremos el quinto elemento. Mientras tanto, no dejes de moverte!
Hasta la próxima!
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